ADORACIÓN EUCARÍSTICA
HORARIOS DE ADORACIÓN
AGOSTO 2024
MIÉRCOLES , JUEVES y VIERNES DE 16 A 18:30 HS y VIERNES DE 19:30 a 20:30 Hs.
PARROQUIA INMACULADA CONCEPCIÓN. ROSARIO.ARGENTINA
LA ADORACIÓN, RESPUESTA DE FE Y DE AMOR
" La Eucaristía es el mayor tesoro de la Iglesia ofrecido a todos para que todos puedan recibir por ella gracias abundantes y bendiciones.
La Eucaristía es el sacramento del sacrificio de Cristo del que hacemos memoria y actualizamos en cada Misa y es también su presencia viva entre nosotros.
Adorar es entrar en íntima relación con el Señor presente en el Santísimo Sacramento.
Adorar a Jesucristo en el Santísimo Sacramento es la respuesta de fe y de amor hacia Aquel que siendo Dios se hizo hombre, hacia nuestro Salvador que nos ha amado hasta dar su vida por nosotros y que sigue amándonos de amor eterno.
Es el reconocimiento de la misericordia y majestad del Señor, que eligió el Santísimo Sacramento para quedarse con nosotros hasta el fin de mundo.
El culto eucarístico siempre es de adoración. Aun la comunión sacramental implica necesariamente la adoración.
Esto lo recuerda el Santo Padre Benedicto XVI en Sacramentum Caritatis cuando cita a san Agustín: «nadie coma de esta carne sin antes adorarla… pecaríamos si no la adoráramos» (SC 66).
En otro sentido, la adoración también es comunión, no sacramental pero sí espiritual. Si la comunión sacramental es ante todo un encuentro con la Persona de mi Salvador y Creador, la adoración eucarística es una prolongación de ese encuentro.
Adorar es una forma sublime de permanecer en el amor del Señor.
ORGANIZACIÓN
Nos basamos en el sistema que se usa en capillas de adoración en todo el mundo.
Tenemos 3 tipos de adoradores:
a) El adorador responsable: es aquel adorador que se compromete con el Señor a acompañarlo al menos con 1 hora de adoración semanal, siempre el mismo día y a la misma hora. Gracias a estos adoradores el Santísimo Sacramento permanece expuesto y siempre acompañado.
b) El adorador suplente: es aquel adorador que realiza una suplencia de un turno de otro adorador que queda descubierto. El ser adorador suplente no obliga a realizar suplencias. Simplemente estará informado de que se necesita realizar una suplencia para que pueda decidir si la cubre o no.
c) El adorador no inscripto: es alguien que viene a adorar con regularidad o que lo hace ocasionalmente pero que no está registrado como adorador.
RECOMENDACIONES PARA LOS ADORADORES
• Adorá al Señor en absoluto silencio. Dios nos inspira y de ese modo nos habla. Respetá el diálogo íntimo y la oración de los otros.
• Podés pasar tu hora de adoración como lo desees, recordando siempre que estás ante la presencia del Señor.
Sugerencias:
- Alabar al Señor. El Señor es digno de toda alabanza, honor y gloria
- Rezar el Rosario (en silencio), que es como contemplar a Jesús con los ojos y el Corazón de María
- Leer algún pasaje de la Sagrada Escritura o textos adecuados
- Hablar con Él. Contarle tus problemas, que Él ya conoce, pero se complace de que se lo digas y busques en Él la solución, la luz, la respuesta.
- Interceder por las personas que conocés que necesitan de tu oración , por la parroquia y por los grupos pastorales, recordá que adorar no es un acto en solitario (aunque estemos solos), somos representantes de una comunidad
- Reparar los sacrilegios, blasfemias, ultrajes e indiferencias cometidos contra Dios, contra la Santísima Virgen o contra los Santos
- Agradecer los dones y bendiciones que Él te dió, especialmente el de poder adorarlo.
- No hacer nada. Simplemente contemplalo y dejá que sea Él quien haga en vos.
• Sé fiel a tu compromiso con tu hora. Sos el eslabón de una cadena de adoración, motivo de alegría y motivación para perseverar.
• Sé puntual a tu cita con Dios. Si prevés que no podrás asistir a tu hora, buscá a alguien que pueda sustituirte o comunicate con el coordinador para que busque un suplente.
• En ningún caso el Santísimo Sacramento debe quedar solo. Siempre debe haber por lo menos un adorador responsable o suplente en su presencia.
• Si tenés que ausentarte del templo asegurate antes que al menos esté uno de los adoradores de tu hora presente. No asumas que cualquier otro adorador se quedará hasta la llegada del siguiente adorador. Ante una emergencia avisá al sacerdote para que el Santísimo Sacramento sea guardado.
• No te retires sin verificar que el adorador o suplente de la siguiente hora ha llegado.
• Respetá y cuidá todos los elementos del templo. Recordá que el Santísimo Sacramento es verdaderamente Jesús, que está presente y merece todo honor y toda gloria. No toques ningún objeto litúrgico. Ni la custodia, ni el sagrario ni la Sagrada Forma pueden ser manipulados bajo ningún concepto
• Mantené el teléfono siempre en silencio.
